En el corazón de nuestro cóctel, el mezcal despierta la pasión con su destilado ancestral. La reducción de tamarindo, como el beso dulce del crepúsculo, añade un toque de exotismo y misterio. Por ultimo, un toque de zumo de pimenton ahumado con naranja.Un susurro de fuego en la noche, completa esta experiencia única que despierta los sentidos y enciende la imaginación con cada sorbo.